Las flores de Bach me han ayudado en un largo proceso de mi vida y hasta el día de hoy. Nada hubiese funcionado sin la asesoría de Mónica, sus palabras y su larga experiencia hicieron que todo sea mejor. Pasé por momentos tristes como felices y siempre ellas me acompañan y me estabilizan.
Soy consultante desde Argentina y sigo siéndolo en EEUU.
Llegué a Moni por Instagram en un momento muy triste en el cual había perdido a mi papá. La verdad no creía mucho en esto no lo voy a negar. Estaba angustiada, enojada, irritada y con muchos sofocos por la menopausia. ¡Hace 4 meses empecé con las flores y me siento muy bien! Estoy relajada, con casi nada de sofocos y mucho mejor de mi angustia.
Agradezco y lo recomiendo porque los cambios son notables.
Mi hijo y yo empezamos hace un tiempo con las flores de Bach. Él por ansiedad y yo porque necesitaba resolver miedos e inseguridades. Al poco tiempo de empezar el tratamiento notamos un cambio rotundo. Disminuyó la ansiedad de mi hijo y yo pude sentirme mucho más segura y enfocada en mis metas.
¡Gracias Moni por tu empatía y predisposición a resolver cualquier inquietud!
La terapia floral me ayuda en mis momentos de ansiedad, encuentro paz y equilibrio cuando el miedo, la frustración, la procrastinación se apoderan de mí. Junto a Mónica, quien me escucha atentamente, con sus devoluciones y los goteros personalizados encuentro calma y bienestar.
Ella con empatía y comprensión me acompañan a profundizar en mis emociones.
Mi hijo Lucas es un niño que le costaba interactuar y aceptar normas en el jardín. Él no aceptaba un no por respuesta y se largaba a llorar sin parar hasta llegar a enojarse y se aislaba. También le costaba compartir y prestar atención a sus docentes. Hace un año comenzamos con flores de Bach y la verdad fue y es de gran ayuda.
Hoy en día mí nene cambio muchísimo! La verdad que estamos muy felices.
Fausto mi hijo tiene 4 años. A los 2 años le diagnosticaron autismo (TEA). Estaba irritable, irascible, lloraba por todo, golpeaba. Estábamos desesperados. Mi hermana me comentó sobre las flores de Bach e incluso me mandó el link de Mónica y me interesó. Le preguntamos a su psicopedagoga y ella nos dio el visto bueno.
Fausto es otro niño, más amoroso, colaborador, menos irritable, y lo mejor es que no golpea más.
Nala es una perrita de 4 años adoptada en la pandemia. Es muy miedosa y hace 2 años que no salía a la calle, teníamos que hacer un gran trabajo para pasearla. Con una fórmula floral de Mónica Nala pudo salir adelante, hasta su carácter cambió! Una tarde vino su adiestrador canino y salió a la calle, cuánta alegría nos dio, tanto esfuerzo valió la pena.
Seguimos ayudándola ahora también con mi otro perro tiene un año y comparten todo el día. Gracias Moni y seguimos porque las flores son naturales y hacen muy bien.